Por: Mariana Mazo Rodríguez
Imagen, Marvel Studios
En esta secuela de “Black Panther” todas las expectativas estaban puestas sobre Marvel Studios ya que con la repentina y triste muerte de Chadwick Boseman el protagonista de la cinta, la vacante para ocupar el título de la Pantera Negra quedó libre y la pregunta de todos los fans era poder conocer cómo o por quién el estudio cinematográfico iba a poder reemplazar al actor.
Esta nueva entrega dentro del Universo Cinematográfico de Marvel está cargada de muchos sentimientos, porque como era de esperarse, en gran medida se trataba de un homenaje y despedida a Chadwick; como los fans ya lo sabíamos gracias a diferentes filtraciones en la redes sociales, el actor no sería reemplazado por otro para continuar la cronología de la historia (como sí ocurrió en Iron-Man), sino que en respeto a su memoria se iniciaría una nueva aventura en busca de la nueva persona que protegería a Wakanda del mundo exterior.
Podemos ver en la cinta, que su nueva protagonista es Shuri (interpretado por Lettia Wright) quien está buscando la manera de proteger a su nación después de la muerte de su hermano aunque no se siente preparada, pero en todo este viaje de emociones va entendiendo la importancia de tomar rápido el puesto principalmente por el nuevo enemigo de su nación.
A pesar de ser una película de aventura, siento que con todo lo que ella va experimentando nos muestra una realidad y es la del duelo, la manera en la que los seres humanos no estamos preparados para la muerte y que sin importar esto debemos continuar con la vida, y ella lo hace cometiendo muchos errores y negándose a sus responsabilidades, pero logra tomar las riendas de su vida y de su pueblo.
Lo más probable es que la audiencia en general esperaba una película llena de momentos emocionantes como en la Saga del Infinito con todas estas batallas épicas donde mostraban la fuerza de los wakandianos, pero Marvel y Disney deciden hacer algo un poco más reflexivo, lo cual no considero que esté mal.
Esta inesperada muerte sí merecía que se hiciera una pequeña pausa a toda la acción a la que nos acostumbramos, y nos dieran momentos más de interiorización, de entender las acciones de los personajes que son un claro ejemplo de la vida real, y por supuesto, darle valor al vacío que dejó este actor en la historia. Aun así, nos presentan nuevos personajes, nuevas posibilidades, y como siempre, un pequeño adelanto de lo que seguirá ocurriendo en este multiverso lleno de posibilidades, donde Wakanda tiene a su nueva Pantera Negra.
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Por otra parte, en temas más técnicos, la banda sonora que está a cargo nada más y nada menos que de Rihanna es increíble, “Lift Me Up” en primera instancia conecta con el mensaje emotivo que tiene toda película, logra que la piel se erice y podamos conectar de una manera muy honesta con este sentimiento de pérdida, además de su letra que es un llamado al amor y tranquilidad, tema que también le dio su primera nominación a los Óscar y la segunda a la franquicia que en 2019 donde se llevó la estatuilla.
En la ceremonia de este 12 de marzo, la cantante interpretará el tema en vivo, lo cual tiene a sus fans emocionados por el regreso de Rihanna luego de estar seis años por fuera de los escenarios y que su presentación en el Super Bowl fuera un éxito. Adicionalmente, la cinta tiene cuatro nominaciones a los Óscar y de ganar, haría historia en Marvel Studios.
Wakanda Forever tiene una puntuación en Rotten Tomatoes que considero justa y concuerdo con la mayoría de críticas donde se le da un 8/10 más o menos. Es una cinta que vale la pena ver, si especialmente eres fan de Marvel y entiendes todo lo que ha ocurrido a lo largo de los años con este increíble superhéroe y su pueblo, los cuales han ayudado a las batallas más importantes de la Tierra.
Claramente si no entiendes mucho sobre todo este universo cinematográfico, en general la cinta transmite un mensaje al público, donde todos de una u otra manera pueden lograr conectar e identificarse sintiendo ese profundo vacío que deja la muerte. Por supuesto que cuenta con entretenidas escenas de acción y la incursión de nuevos superhéroes, villanos y nuevas pérdidas que cambian un poco el rumbo de todo. Un sentido y justo homenaje a Chadwick Boseman como aparece al final de la cinta.