Por: Mariana Toro y María José Quintero
15 de septiembre de 2022
En Medellín, la industria del libro es un factor con resultados beneficiosos, la industria cultural tiene buena monetización y la economía cultural ha mostrado crecimiento en los últimos meses. Esto se evidenció en un recorrido por bibliotecas y librerías, motivadas por la realización de la Fiesta del Libro y la Cultura, que cada año pone en la agenda pública los temas relacionados con el consumo cultural.
La ruta comienza en la Biblioteca Pública Piloto su llamativa y bien edificada infraestructura nos lleva a conversar con el bibliotecario Sigifredo Vasco, quien mencionó la importancia de esta biblioteca para la sociedad y la historia de los paisas, así como también la cantidad de eventos y campañas de incentivo para disfrutar de la lectura y hacer parte de ella.
Al ser una biblioteca pública brinda todos sus servicios de manera 100 % gratuita , “tienen muchos eventos para personas de distintas edades, así como puede haber un concierto para jóvenes y se puede llenar, puede haber una conferencia para jóvenes en el auditorio; la biblioteca es muy visitada sobre todo por jóvenes y adultos mayores”
“La biblioteca brinda espacios de calidad, totalmente inclusivos”
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Seguimos para la Librería Fernando del Paso allí mismo en la Piloto; Valeria García Duque, librera por hace más de 3 años, nos comenta cómo luego de la pandemia, la venta de libros físicos aumentó de manera considerable, explicó cómo cobró importancia “el objeto estético”, y como así las personas despertaron un enorme amor por los libros físicos.
En la entrevista menciona cómo la economía cultural, específicamente en los libros, es sustentable para las grandes empresas y editoriales, pero sería más complejo para los independientes.
“Nadie acabará con los libros”.
De un texto de Umberto Eco
Desde otro lado de la ciudad, en Tragaluz Editores, María José Mejía, estudiante de último semestre de la carrera de literatura en la Universidad Eafit, nos habló de los géneros más populares.
Vemos la coincidencia de los géneros más comerciales tanto en la biblioteca como en esta editorial independiente.
No es cuestión de un rango social o de edades, la cultura es un factor que atrae y hace encajar todos los aspectos que incluye el entorno, la cultura es de todos y para todos.
Ahora bien, centrándonos en el factor monetario dentro del mercado cultural, María José nos habla sobre lo que ha representado el libro y otras manifestaciones culturales a lo largo del tiempo:
“El capital simbólico es lo que ha mantenido a flote la industria”.
Posteriormente, quisimos conocer las apreciaciones que desde Panamericana, una de las papelerías y librerías más grandes a nivel nacional, se tiene al respecto.
Yaneth Builes, una de las profesionales de contaduría, afirmó: “Panamericana ha sido una empresa encargada de crear, más que ser una reconocida librería y buscar fines monetarios, todo el crecimiento económico se ha dado en el proceso de buscar ser una librería que incentive y cultive amor hacia la lectura”.
Además comenta que la industria cultural si es sustentable, “la economía cultural alcanza a ser al menos un 9 % de la economía del país”.
En Panamericana de la ciudad de Medellín los 5 géneros que más ingresos han generado en el último semestre han sido las novelas, los cómics, los libros de autoayuda y las revistas; las librerías en Medellín cuentan con una gran similitud en sus ventas.
Después de este recorrido con agentes del sector cultural con énfasis en la rentabilidad, lo que más prevaleció fue reconocer la vocación y el amor a la cultura por sobre todo lo demás. La fascinación con la que hablan de los libros, ubican a la lectura y la cultura como un escenario en el que giran amplias estrategias en favor de lo social y lo económico.